La realidad de los productos lácteos

Desde muy pequeños crecimos con la idea de la necesidad de consumir productos lácteos porque eran los que nos aportarían vitaminas, minerales, proteínas, calcio y grasas saludables.  Esta idea estaba reforzada por nuestros padres, médicos, profesores, medios de comunicación y personal de la salud.

Con el transcurrir del tiempo hemos visto cómo los han enriquecido con vitaminas y minerales añadidos y en los comerciales los siguen presentando como alimentos muy saludables.

Hoy queremos presentarte la realidad de consumir lácteos y sus efectos en la salud:

1. Somos la única especie animal que consume leche después del período la lactancia.
2. La única leche adecuada para el ser humano es la de su propia especie.
3. Consumir lácteos aumenta el riesgo de padecer alergias y asma.
4. El 75% de la población mundial es intolerante a la lactosa.
5. Los lácteos empeoran la gastritis y el colon irritable.
6. El calcio de los lácteos nuestro cuerpo no lo puede asimilar. En muchos alimentos vegetales encuentras calcio: Brócoli, amaranto, vegetales de hojas verdes, almendras, frutos secos, semillas como el ajonjolí, fríjoles, tofu, etc.
7. Los lácteos tienen exceso de proteína (caseína), que nuestro cuerpo no puede asimilar. Ese alto grado de acidez el cuerpo lo equilibra sacando calcio de los huesos y produciendo osteoporosis. Los lácteos no protegen contra las fracturas, todo lo contrario, las aumentan.
8. Los lácteos agotan el Sistema Inmunológico.
9. Aumentan el riesgo de contraer diversos tipos de cáncer.
10. Te recomendamos consumir bebidas vegetales naturales y quesos vegetales.